Llega la primavera y dice
!ay¡ como vengo hoy,
tengo estrellas en mi cabeza
bombones en el corazón,
y por si fuera poco rebosad-ita estoy de amor.
Y en esto llega el verano,
y dice ¿ohf? que calor
me daría un chapuzón,
bueno para el tiempo que me queda,
mejor me doy dos.
Llega el otoño y contesta
si yo como vosotros estuviera
el mundo me pondría en montera.
Y don invierno dice
yo que en primavera nací,
en verano me críe
en otoño en hombre me convertí,
...
El perrito abandonado,
que triste soledad,
refleja su mirada,
perdido en el horizonte.
Se acuesta,
se levanta,
se sienta
se despereza,
pero la triste soledad,
sigue reflejada en su mirada,
perdida en el horizonte.
Beis,blanco,
que monada,
pero el pobre-cito,tenia ganas,
y la tristeza mas sublime,
es, la que refleja
en su mirada.
Perdida en el horizonte,
añorando aquella llamada,
pero nadie se le acerca
para ofrecerle una mirada,
al perrito abandonado.
Maía del ...
Me traicionaste,
y te reíste
de mi querer.
Y no entiendes
que esté sufriendo de dolor,
por que tu, traición,
mela hiciste, con otra mujer,
y sí?
al menos fuera mejor,
pero tiene cara de zanahoria,
y dientes de ratón.
Mira-me,
compara-me,
y di-me donde esta la comparación,
solo quiero que sufras
como estoy sufriendo yo,
hasta que me pidas perdón.
Si no seguirás traicionando,
el sentido de la razón.
Me traicionaste,
con otra mujer,
y te reíste de mi querer...
Fui?
la margarita,
que deshojaste,
fui?
la flor mas hermosa,
y mas grade
que encontraste.
Pero nunca
su-pistes respetarme,
y nunca, nunca
un valor, su-pistes darme.
y ahora que el tiempo a pasado,
cuenta te estas dando,
pero ahora,
todo queda en la historia.
Por que marcha atrás
no puedes darle,
solo queda en tu memoria
mientras pueda recordarme.
Fui?
la margarita,
que deshojaste,
fui?
la flor mas hermosa,
y mas grande que encontraste.
María del Carmen Pallas S...
Era un dieciocho de abril,
por la mañana temprano,
a la peluquería yo me fui,
para que guapa me pusiera,
y yo así poder presumir.
De regreso a mi casa,
yo presumía contenta,
pero¡
ilusa de mi?
lo que no esperaba,
a recibir una gran sorpresa.
Camino de mi casa,
hay unas escaleras
yo que contenta que iba
presumiendo de mi belleza,
pero aquellas malditas escaleras,
se pusieron celosas de mi belleza,
y en el ultimo escalón,
las puñeteras, me dieron un empujo.
