Cuando el cantar me aflora,
la música pone su nota,
no sé lo que por mi pasa,
que el llanto me ahoga.
Cuando a mi virgen del Carmen,
veo,
cubiertas de flores blancas y lilas,
con su vestido celeste, de seda,
y sus manos llenas de perlas finas.
Sueños por el aire esparcidos,
caen en las temblantes ondas,
y el mar, con sus olas,
música celestial les e toca.
Y las Sirenas cantando,
festeja a su Señora,
y el astro rey con sus rayos,
serenatas de gloria les toca...